No eres tu la doncella ni yo la bruja de este cuento.
En realidad somos muestra tangible de que los cuentos de hadas solo existen en la imaginación de los niños. Yo te creí princesa y resulta que no eres mas que un ser humano común, mi hada madrina se llama dopamina intentaba dibujarte en mi vida como la gran heroína y solo eres una mujer mas.
No hagas de esta historia una casería de brujas que no eres tu la princesa en apuros y no yo seré 'el príncipe azul' que te rescate. Mas bien eres como los bardos de Grecia, hábil para contar historias, para crear mundos fantásticos donde al final nunca serás la protagonista..
Debo reconocer que creaste un bello cuento que se enriqueció entre sueños de cristal, mentiras perfectas y palabras huecas.
El gran teatro dejo caer el telón y tu y yo nos volvimos fragmento de ficción, una de esas historias baratas que se cuentan en libros mediocres, que venden los puestos de revistas...
A si que al final no soy yo la bruja ni tu la princesa del cuento..
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Gracias por leerme